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El pabellón atronaba. Cuando llegó su amigo, él ya ocupaba su lugar absorto con los estiramientos de los jugadores de ambos equipos.

– ¿Madrugador, eh compi? ¿Qué pasa? ¿Cómo lo llevas?

– Aquí, con ganas de mandanga, que este año tengo buenas sensaciones.

– Vale señor Lobo, no te apresures que aún queda mucha tela que cortar.

– Que sí tío, que vale, pero los nuevos me dan muy buen rollo. Mira el israelí, que Bo era un fuera de serie, pero estaba cascado y éste tiene muy buena pinta.

– Sí, en eso salimos ganando. ¿Y Eriksson? Es una metralleta, el tío.

– Bueno, Kyle era más purista, más estético, pero no creo que perdamos demasiado con el cambio.

– Balvín me preocupa un poco más, tiene ya 25 años y parece un veterano, para lo bueno y lo malo.

– Habrá que ver por dónde tira, pero me da buen rollo, aquí la gente suele mejorar mucho su rendimiento.

– Nos pasamos la vida haciendo ricos a los jugadores, jejeje.

– Y bueno, luego están los de siempre: Xavi, Eulis, Pablo, Anžejs… con estos contamos seguro, nunca fallan.

– ¿Y Oriol? Ojo con Oriol, que en la pretemporada y en la Supercopa, se le vio diferente; otro jugador, con ganas y con acierto.

– Ya estás como los juntaletras esos del blog.

– Cuidadito con las comparaciones que uno es una persona honrada y de buenas costumbres.

– Buenas costumbres dice… con las que formas siempre en la Copa del Rey.

– Y este año… pienso repetir.