— ¡Qué carita me traes!
— Calla coño que con las emociones no he dormido nada.
— Pues yo caí planchado, cuatro horitas, pero bien dormidas.
— Anda, déjame uno de tus cruasán que no me veo con fuerzas de levantarme a por uno.
— Será por el abuso, pero te juro que me sabe a marisco.
— Ya, y el café a Albariño, no te jode.
— Je, je je…si anoche hubiéramos tenido un poquito, sólo un poquito más de suerte, joder entonces si que estaríamos resacosos.
— Y que lo digas. ¿a qué hora es el vuelo?
— A la una, vamos justitos.
— ¡Qué mierda tío! tanta historia para que al final ganen los de siempre.
— Venga hombre ¿qué más da? Si disfrutamos más nosotros perdiendo, que ellos ganando.
— Es que me jode, estuvimos tan cerca coño, tan jodidamente cerca. Hubo un momento, casi al final, que de verdad que creí que podíamos liarla.
— Que nos quiten lo bailado.
— Eso es, lo que más me jode que ahora vendrán con el paternalismo de los grandes. Que, si qué merito tienen, que con ese presupuesto más no se les puede pedir, pero en seguida a darle bola al Madrid, o lo que es peor, a centrarse en el batacazo del Barça, como siempre.
— No te hagas mala sangre que estos cuatro días no nos los quita nadie.
— Y qué días… y noches.
— Nuestros MVP no tendrán copa pero nosotros unas cuantas nos llevamos puestas.
— ¿Con quién te quedas? de los nuestros digo.
— Buf, no sé … Eulis estuvo brutal pero es que Albért, Albertito es especial, es otra cosa.
— Y DJ, al final va a resultar que es bueno, el jodío.
— Pues aunque en la final se le vió un poco superado por las circunstancias, Alen nos ayudó mucho. Y cómo ha mejorado en el tiro libre, algo le han cambiado en la mecánica, estoy seguro. Pero claro, es muy joven, como Kevin. Se les tiene que notar de alguna manera, si no, no estarían con nosotros.
— Oye, que te olvidas de Aguilar, estaba jodido, con lo que curró en todos los partidos, el crack.
— Si es que, no nos podemos quejar de ninguno, no ahora. Los que jugaron mucho, los que jugaron poco, los que no jugaron nada, todos. Hasta nosotros, coño que la bulla que hemos metido con el pío pío, no fue pequeña.
— Anda termínate eso que tenemos que subir a la habitación a por las maletas, mañana hay curro y habrá que descansar un poco, que con esta cara de zombies que llevamos, igual nos mandan al paro.
—Venga vamos.
—Oye tío… ¿Y Taph?
— Esa deuda ya esta saldada, la de él. La nuestra, no se la pagaremos nunca.
— Amén a eso.
— Amén.